Bueno, que mejor manera que aprovechar un final de año para poner un nuevo artículo en el blog y que no coja demasiado polvo. Porque una vez que estas cosas se quedan abandonadas es muy difícil volver a retomarlas.
Este año no ha sido el mejor, han pasado un montón de cosas en el ámbito personal que se escapan de mi control y que me han tocado bastante la moral y me han afectado de varias maneras. Lo cual es frustrante porque no hay nada peor que estar en medio de cosas donde no tienes ni voz ni voto y tienes que navegar con la situación como si de repente fueses un pirata del caribe.
En el ámbito del rol empecé también como el culo, abandonando a las bravas un foro de cuyo nombre no quiero acordarme tras provocaciones y tocamientos de moral prolongados y dando carpetazo a mi campaña de Juego de Tronos de mesa tras no conseguir reunir a mis jugadores en cuatro meses. Luego intente retomar la dirección llevando dos partidas por foro, una de La Puerta de Ishtar, juego que me sorprendió gratamente, y otra de Juego de Tronos. Ninguna funcionó.
Pero no me voy a quejar más, al final parece que poco a poco la tormenta ha pasado y el mar vuelve a estar tranquilo. He empezado a dirigir Curse of the Crimson Throne en mesa usando reglas de Pathfinder con muy buenos resultados, por ahora he conseguido acabar el primer módulo y parte del segundo a un ritmo mas que bueno.Aprovechando también estoy llevando el adventure path de Council of Thieves en foro ya que usa el mismo sistema. Creo que mi actividad rolera se ha afianzado después de todos los tropiezos, y estoy contenta con el resultado.
He de añadir como plus que aunque he perdido el contacto con bastante gente a la que consideraba de confianza y cercana las personas que menos esperaba me han sorprendido muy gratamente, me estoy reconciliando con mi lado mas creativo y tengo un libro bastante empezado, del cual a diferencia de otros proyectos fallidos tengo bien clara la trama. Por no hablar de mi recientemente descubierto don con los idiomas en general y el japonés en particular.
En definitiva voy a quedarme con lo bueno, que haciendo balance es mucho, y con el apoyo incondicional de +Francisco Solier que ha hecho todo mucho mas llevadero. Creo no hay mas que añadir. Al final después de todo no le voy a dar un suspenso a 2013.
No tengo nuevos objetivos de cara al año nuevo, tengo muchos proyectos empezados este año y simplemente espero continuarlos e ir terminando algunos como el libro.
Espero que tengáis un 2014 lleno de objetivos cumplidos, gatos, mucho rol y críticos, sobre todo críticos.
¡Feliz año!
